En Lamadrid Estate Wines se llevó a cabo la Dionisias Wine Fair, la primera feria en Argentina en ser protagonizada por mujeres del vino. El evento contó con la participación de 25 mujeres profesionales, entre enólogas y bodegueras, y superó una concurrencia de 400 personas.
La feria fue una oportunidad única para degustar 90 de las mejores etiquetas del país, de la mano de sus creadoras. En un día de sol radiante, se destacaron reconocidas enólogas como Gabriela Celeste (Eno Consultora), Estela Perinetti (Las Estelas), Andrea Ferreyra (Finca La Celia), Magdalena Viani (Trivento), Alejandra Riofrío (Navarro Correas), Paula Borgo, Clara Roby y Flor Castellani (Feraz), Mariela Ardito (Ubuntu), Evelin Colchad y Victoria Prandina, junto a Cecilia Buj (Bodega Vinorum); Marianela Rossi (Reval de San Isidro), María José Vera (Bodega Budeguer), Angelina Yañez (Lamadrid Estate Wines), Denis Vicino (Finca La Anita), Graciela Reta (Santa Faustina), Miriam Gómez (Antigal y Sólo una vez), María Jimena López Campos (Sólo una Vez y Grafitto), Paula González (Pyros Wines), Gabriela García (I+D en Bodega Salentein),
También hubo varias integrantes de Mujeres de la Viña, un grupo conformado por 23 mujeres viñateras de Valle de Uco con un proyecto conformado por dos vinos. Además, la feria contó con la participación de bodegas cuyas dueñas son mujeres, como Susana Balbo, Lagarde, Huentala Wines y Domaine Bousquet.
La Dionisias Wine Fair fue una verdadera celebración del Malbec y de la labor de las mujeres en el mundo del vino argentino. Una muestra del creciente protagonismo femenino en la industria vitivinícola del país.
Las organizadoras de Dionisias Wine Fair, Gabriela Malizia y Florencia Da Souza agradecieron a Lamadrid Estate Wines y a su propietaria Gabriela García, por ser la bodega anfitriona de esta primera e inolvidable edición y auguraron en breve una segunda, con sorpresas y más mujeres del vino sumándose a la propuesta.
Esta fiesta fue coronada con la música del DJ Gustavo Parra, unas ricas empanadas ofrecidas por la bodega y, por supuesto, por los deliciosos cafés de El Molinillo, con su pastelería.
